Tras unos días intensos, conviviendo con la naturaleza y la gente de los pueblos que
tan bien nos han ido acogiendo en estos tres días de volante, ¡¡hemos llegado a
Villaconejos!!. Allí, y tras un merecido descanso después de la última marcha
nocturna, nos hemos distribuido en las habitaciones, comenzando con los
primeros juegos de la tarde. Ya al caer el día, tuvimos el Acto Penitencial,
donde pudimos reconciliarnos con el Señor y nuestros hermanos. ¡Toda una
gozada! Para concluir la jornada, acabamos con el ¡¡Bang!!, juego de estrategia y
despiste.
Estamos viviendo unos días muy especiales, donde hemos podido
disfrutar de los parajes que nos regala nuestra serranía, aprendiendo el valor
del camino y poniendo a prueba nuestro espíritu de superación.
Os dejamos algunas fotos de estos días pasados: