🦁LA SABANA🦁
El sol se eleva sobre las impresionantes planicies de la Sabana africana y al ritmo de la música nos despertamos para descubrir que los animales de la selva nos invitan a bailar con ellos para comenzar el día llenos de energía.
Tras un completo desayuno, hemos limpiado el campamento y nuestras habitaciones, aunque estemos en la selva, no queremos que se conviertan en leoneras. Como buenos aprendices de Simba, hemos llevado a cabo un rastreo por los dominios del rey león y nos hemos divertido con distintos juegos tribales junto a la fauna africana. Tras admirar el don de la Creación y sentirnos un auténtico clan, la mañana ha concluido acercándonos al Señor en la misa donde hemos cantado y le hemos dado gracias a Dios por este maravilloso inicio de campamento.
Resulta que las mejores cocineras de la tribu nos han vuelto a sorprender y tenían preparada una exquisita comida que ha repuesto todas nuestras ganas de continuar divirtiéndonos.
Por la tarde, hemos recibido la visita de un grupo de agentes medioambientales, los defensores de la Naturaleza, que nos han enseñado un montón de cosas sobre nuestro entorno y cómo debemos proteger el Medio Ambiente. Al final del taller, y como una sorpresa especial para nosotros, hemos asistido a la liberación de una pequeña culebra que ha sido devuelta delante de todos a su necesario lugar en el ciclo de la vida.
No nos ha dado tiempo a superar la emoción de este momento único y ya estábamos de nuevo en acción, nos aguardaba una alucinante Farinato Race por las Tierras del Reino en la que hemos ido contrarreloj corriendo de prueba en prueba, hemos probado nuestra habilidad, nos hemos reído a carcajadas y hemos disfrutado de mucha mucha agua en todo el recorrido.
La tarde no podría haber estado completa sin la catequesis, en la que nos hemos juntado otra vez en pequeños grupos para conocer un poco más a Jesús. Tras la cena, la velada nos ha traído un rescate en el que hemos actuado como leones y gacelas persiguiéndonos entre todos y ganándonos un merecido descanso esta noche. Tras la oración todos juntos nos hemos metido en el saco con una pregunta en mente: ¿a dónde nos llevará mañana nuestra aventura?